Lugares turísticos de Sudamérica que te deslumbrarán en tu próximo viaje

América del Sur es una tierra de una belleza sobrecogedora, de territorios vírgenes como las Cataratas de Iguazú o el impetuoso Salto Ángel en enclaves selváticos, de montañas enormes que se adentran en la costa como podemos contemplar en el Parque Nacional de Tayrona, en Colombia. Con maravillas creadas por la mano humana como Machu Picchu, o ciudades como Río que es una explosión de experiencias antagónicas, desde el ruido y la samba del carnaval, las aguas y arenas de sus playas o lo grandioso de sus monumentos y museos.

Argentina, Brasil, Colombia, Perú y Venezuela, son solo algunos de los lugares donde podremos encontrar algunas de las maravillas del mundo y sitios donde el viajero que acude ya no podrá olvidar nunca, y es que, sin duda Sudamérica ofrece paisajes hermosos, una gran historia, una rica cultura y una gastronomía variada que deslumbra aquellos quienes la visitan.

Machu Picchu, Perú

Levantada en el siglo XV por encargo del Inca Pachacuteq, Machu Picchu -que en castellano significa montaña vieja- es una ciudad rodeada de templos, canales de aguas y andenes, y elevada en lo alto de una montaña.
Mientras buscaba la ciudad inca de Vilcabamba, el arqueólogo norteamericano Hiram Bingham descubrió el Machu Picchu el 24 de julio de 1911, gracias a las indicaciones que le hicieron un guía y dos niños.
Edificada con grandes bloques de piedras calizas pulidas y unidas unas a otras sin el uso de mortero, está dividida en un sector agrícola trazado sobre una intrincada red de terrazas artificiales, y una parte urbana salpicada de edificaciones y plazas donde se erigen varios santuarios como el Templo del Sol, el de las Tres Ventanas, el del Cóndor y el Templo Principal.

Esta maravilla arquitectónica fue inscrita por la Unesco en su registro de Patrimonio Cultural y Natural de la humanidad.

Esta colosal arquitectura contiene, a lo largo de toda la ciudadela, unas 140 estructuras. Para el turista, las vistas panorámicas que se divisan desde lo alto de Machu Picchu son ideales para ser inmortalizadas por las lentes de una cámara. Para llegar hasta allí, los visitantes pueden tomar el tren desde Cuzco o aventurarse a recorrer el trayecto a pie siguiendo una ruta de varios días por caminos ideales para hacer senderismo.

Cataratas de Iguazú, Argentina – Brasil

Emplazadas entre las provincias de Misiones en Argentina y el estado brasileño de Paraná, Iguazú son un conjunto de cataratas que dejan caer sus caudales de agua sobre el río que lleva su nombre.
Protegidas sus áreas en territorio argentino por el Parque Nacional de Iguazú, y dentro de las fronteras brasileñas por el Parque Nacional do Iguaçu, las Cataratas de Iguazú están consideradas una de las siete maravillas naturales del mundo.
Situada en medio de la selva tropical, cada segundo fluye más de 6 millones de litros de agua a lo ancho del parque.
Las oportunidades de disfrute que ofrecen las Cataratas a los turistas son muchas y le harán vivir una experiencia de viaje extraordinaria.
Ubicados casi todos ellos en la parte argentina, Iguazú está formad por 275 saltos de agua. El mayor de ellos, la Garganta del Diablo, alcanza los 72 metros de altura y desde el que se puede disfrutar desplazados en los trenes ecológicos.
Otro de los grandes atractivos con que cuenta visitar las Cataratas de Iguazú es el de admirar su paisaje navegando en lancha o recorriendo a pie los senderos mientras se contempla la fauna de la selva semitropical de la provincia paranaense.

Río de Janeiro, Brasil

Río es algo más que su carnaval o la colosal efigie del Cristo Redentor del Corcovado, otra de las siete maravillas del mundo. Algo más que sus favelas o del dudoso honor de ser una de las ciudades más peligrosas de la tierra.
En la Ciudad Maravillosa podemos bañarnos en sus playas de Copacabana e Ipanema o confundirnos con los ríos de deportistas, paseantes o vendedores de pareos que las recorren de arriba abajo, o poder disfrutar de una exquisita caipirinha.
Podemos visitar el Museo de Arte de Río, el Barrio Centro y la zona portuaria salpicada de monumentos históricos como el Palacio Imperial, los Arcos de Lapa o la Iglesia de la Candelaria.
Si nos gustan los museos tendremos la oportunidad de visitar el Nacional de Bellas Artes, el Museo Histórico Nacional o el Centro Cultural Banco de Brasil.

Parque Tayrona, Colombia

La montaña costera más alta del mundo se halla en los ramales de la Sierra Nevada de Santa Marta, en Colombia. Allí la naturaleza ha labrado ensenadas y bahías de una belleza fascinante. Lugares maravillosos como Neguanje, Concha, Guachaquita y sus playas de arenas blancas bordeadas de matorrales y bosques, y siempre bañadas por las aguas límpidas del Caribe.
Ya sea para disfrutar contemplando el paisaje o para adentrarse en sus tierras mochila a la espalda y senderos y caminos por delante, para practicar buceo o para admirar los restos arqueológicos de la antigua ciudad de Tayrona, el parque que lleva su nombre es un lugar único al que visitar.
El turista que visite el Parque Tayrona debe llevar ropa fresca de algodón, camiseta y pantalón largos para proteger la piel de las acometidas de los insectos, calzado resistente que cubra hasta las rodillas, sombrero e impermeable para las épocas de lluvia.

Salto Ángel, Venezuela

Enclavado en el Parque Nacional de Canaima, en el estado de Bolívar en Venezuela, el Salto Ángel es la caída de agua más alta del mundo. Su altura es de 979 metros, de los cuales 807 son de caída ininterrumpida.
Protegido como parque natural desde el 12 de junio de 1962, y declarado Patrimonio de la Humanidad en 1994, se extiende a lo largo de más de 30 000 kilómetros hasta la frontera de Brasil.
Su nombre de Salto Ángel se debe al aviador estadounidense Jimmie Angel que, al sobrevolar la zona con su avioneta en 1937, colaboró en situar el lugar exacto de su caída.
El bramido que ruge de la colosal columna de agua que brota del Salto Ángel, descarga su furia de caudal en el vacío y desaparece en la bruma que surge del agua al romperse en el vacío y perderse en la inmensidad del Parque Nacional de Canaima, un lugar único cuajado de ríos, selvas tropicales y mesetas rocosas.